Llorando lo perdido no vemos lo ganado

Palabras Por Carlos Balaguer Miércoles, 20 de Agosto de 2008

L

amentándonos por lo que ayer perdimos o en la incertidumbre de lo que mañana lleguemos a tener, dejamos de ver lo maravilloso de lo que ahora poseemos. Podríamos haber perdido mucho, pero lo poco o tanto que tengamos en este lapso presente, compensa todo lo que ayer se malgastó. Aun la derrota o el fracaso de días pasados, son pagados por el grande o humilde triunfo cotidiano del presente.

Llorando lo perdido no vemos lo ganado. Como seguir lamentando el triste atardecer del día pasado y no admirar regocijados el reluciente amanecer del nuevo día. Por tanto, valora los tesoros del hoy esplendoroso y apártate un instante de la nostalgia del ayer o de la incertidumbre del mañana.

Como el extraño automovilista de Mc Luhan, iremos en la existencia caminando hacia delante, pero viendo al pasado por el espejo retrovisor. Torcidos del cuello terminamos los fantasmas de la urbe como la mujer de Lot convertidos en estatuas de sal y necedad. Viendo al fracaso de ayer y no al triunfo del presente. Llorando las rosas marchitas no veremos --a causa de las lágrimas-- las nuevas y perfumadas rosas de la ilusión…